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¿Qué es el estrés?

El estrés es un proceso natural de adaptación del individuo a su medio, para poder atender las demandas de cualquier situación (por ejemplo, las tareas académicas, laborales y domésticas) cuando no tiene recursos suficientes (tiempo, energía, alerta, concentración, apoyo social, dinero, condiciones físicas) y necesita generarlos activándose más de lo normal durante algún tiempo (trabajar más deprisa, más horas, en peores condiciones, descansar menos, mantener la temperatura interna constante bajo situaciones adversas), hasta conseguir el objetivo.

Las emociones y el estrés están íntimamente relacionados, aunque son procesos diferentes. Las emociones son reacciones puntuales a ciertas situaciones relevantes para la adaptación del individuo (como el peligro de muerte, la pérdida de un ser querido o el examen de entrada en la universidad); el estrés, es una reacción general de activación de recursos ante cualquier situación cuyas demandas debemos afrontar (como por ejemplo mantener un buen nivel de actividad durante ocho horas en nuestro puesto de trabajo) y para la que no tenemos suficientes recursos (estamos cansados pero todavía debemos mantenernos activos y además el ritmo de trabajo es rápido y exigente).

Con frecuencia la reacción de estrés produce emocionalidad negativa, sobre todo ansiedad, que es una reacción emocional de alerta cognitiva, de activación fisiológica, de agilización motora, ante la posibilidad de obtener un resultado negativo (que el individuo considera amenazante). También puede producir emociones positivas, como la alegría o la euforia, cuando conseguimos un éxito, aunque la reacción de estrés suponga una sobreactivación que puede ocasionar un aumento de la actividad fisiológica. Una persona que lleve un cierto tiempo sometida a situaciones estresantes, tenderá a estar más activada de lo normal, así como a presentar mayores niveles de ansiedad, irritabilidad e ira. Si a largo plazo no se resuelve este estado emocional, puede adquirir ciertos tintes de tristeza e incluso llegar a un estado de ánimo deprimido, por cansancio emocional. Véase el vídeo “Estrés y Ansiedad” del grupo de investigación del profesor Sandin de la UNED.

http://canal.uned.es/mmobj/index/id/7923

Pero el estrés no sólo produce reacciones emocionales, sino que en general supone un incremento de la actividad cognitiva, fisiológica y conductual, un esfuerzo por incrementar los recursos necesarios para atender las demandas de la situación; esfuerzo que no podremos mantener indefinidamente, pues este estado de sobreactivación al final producirá cansancio e incluso agotamiento.

Para hacer el mismo trabajo con menos operarios, por ejemplo, necesitamos con frecuencia pensar más deprisa, gastar más energía, actuar más rápidamente, trabajar más horas, descansar menos, etc. Por ello, tras un cierto período de tiempo en el que estemos sometidos a este estrés, tenderemos a agotar todos esos recursos que hemos dinamizado (energía, capacidad de concentración, capacidad de respuesta) y necesitaremos descansar, dormir, comer, volver a una situación más calmada que nos exija menos demandas y nos permita recuperarnos de ese desgaste.

Descansando, reduciendo el ritmo, iremos recuperando de nuevo la energía consumida, los recursos gastados y volveremos a recobrar el brío, la fuerza, la capacidad de concentración, de decisión, la agilidad, etc., que habíamos perdido. De esta manera, afrontar el estrés normal de cada día (despertarnos, conducir, trabajar, resolver problemas, atender la casa, nuestros cuidados, los de nuestros hijos, etc.) no debe ser un problema grave, siempre que no tengamos que activarnos en exceso, durante mucho tiempo, no nos agotemos del todo, contemos con apoyo social y si cada día podemos descansar lo suficiente, durmiendo ocho horas, descansando más en los fines de semana y en las vacaciones. Nuestro organismo cuando no está sometido a estrés tiende al equilibrio, a la homeostasis, a la recuperación de la energía y de los recursos gastados, a la restauración de los daños sufridos, Por lo tanto, para recuperarse del estrés se requiere descanso, hacer rupturas en nuestro nivel y tipo de actividades desempeñadas.

Véase el vídeo de Canal UNED titulado El estrés, en el siguiente enlace:

http://www.canaluned.com/mmobj/index/id/12622

Véase el vídeo de Canal UNED titulado Estrés y ansiedad, en el siguiente enlace:

http://www.canaluned.com/mmobj/index/id/7923

  
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